Theodor von Hörmann, el Impresionista del País de las Maravillas

El legado de los austríacos en el mundo del arte es enorme, especialmente en la música con grandes compositores como Schubert y Strauss. En la pintura inmediatamente asociamos a Austria con Klimt, Schiele y Kokoschka. Sin duda ellos dejaron una huella notable pero casi nunca recordamos la impronta de Theodor von Hörmann, él fue uno de los artistas más inusuales y autónomos de finales del siglo XIX pero que, debido a su fugaz paso por este mundo, no llegó a desplegar totalmente su estilo. Sus ideas innovadoras y visionarias no lograron alcanzar el reconocimiento que para mí se merece.

En 1895 lo reclamó la muerte y le impidió dar ese paso final hacia el modernismo, esta última entrega es un ejemplo fenomenal, vívido e impresionante de la lucha por una nueva percepción y un lenguaje pictórico adecuado en el contexto de los movimientos artísticos internacionales.

Timoleon Lobrichon, Homenajeando a cada Niño del Mundo 👶😇😍🐰

En un momento en que la tendencia es perseguir lo abstracto, este tipo de óleos sin tiempo me recuerda dónde reside la raíz y el sentido de todo lo que importa en la vida.  Timoleon Marie Lobrichon también lo sintió así y por eso se dedicó a crear estas encantadoras escenas de infancia  (⊃｡•́‿•̀｡)⊃━☆ﾟ.*･｡ﾟ

Califico con muchas estrellas a este artista; me gusta la pintura de género. Puede ser considerada por la crítica como demasiado dulce, monótona y sentimental, pero esa puede ser precisamente una de las razones por las que a muchos nos gusta tanto. Es la vida en el nivel más básico. 

Los chicos cambian. Los niños se convierten en adultos; pero la infancia es una constante. Los detalles, entonces y ahora, pueden diferir, pero la experiencia de crecer... no tanto.

Por eso, porque supo transmitir la fugaz temporalidad de la niñez, el poder expresivo de las cosas cotidianas, la interioridad del hogar, la vida escolar, los juegos sencillos y el valor de la vida familiar es Lobrichon el escogido por mí en esta hermosa celebración de hoy.

Estar rodeado de chicos es lo mejor de lo mejor, es divertido, nos alegran y traen calor al corazón. Que tengan un maravilloso Día del Niño.

Angel Caído: La Furia Silenciosa de Lucifer, de Alexandre Cabanel

Ha sido expulsado del Cielo el ángel más bello y está lleno de ira hacia su Creador. 

Estamos ante el mismísimo Lucifer, quien fue durante un tiempo la mano derecha de Dios. Inteligentísimo y muy hermoso, el ángel tenía un pequeño defecto: la soberbia. Un día tuvo la desastrosa idea de rebelarse contra su creador al creerse igual que él, y la cosa no terminó nada bien.

Era el año 1847 y Alexandre Cabanel, de 24 años, estaba en camino de convertirse en uno de los genios más destacados de la pintura académica francesa gracias a la impresionante Fallen Angel, posiblemente una de las mejores obras de arte jamás realizadas. 

Hasta ese momento, las pinturas religiosas e históricas generalmente incluían santos, ángeles y figuras heroicas como tema, pero la pintura de este artista fue una de las primeras en representar al Diablo, académicamente hablando.

Se libró una gran batalla en el Cielo; un grupo de ángeles rebeldes fueron derrotados por el ejército del arcángel San Miguel. 

El ser alado protege su rostro detrás de los brazos flexionados, parece estar ardiendo de ira por lo que le acaba de pasar. Su cabello de fuego se agita con el viento, y las cejas se curvan sobre los ojos enrojecidos donde una lágrima de ira asoma. Su postura parece reposar aunque cada músculo está flexionado con energía potencial. Podría significar también una postura de semi-alerta, como si estuviera listo para atacar. 

Pero el hijo de la Aurora ha sido abatido. Tiene una mirada de odio, de impotencia, de  frustración por todo aquello no alcanzado, por el poder negado.

Sobre él vemos a varios ángeles que vuelan o flotan en la vasta extensión del cielo. Parecen estar celebrando.

Una auténtica maravilla. Ampliamente reproducida, esta pintura se ha convertido casi en un cartel de belleza, una representación visual del chico malo sexy divino de la muerte.

El gran Alexandre Cabanel mostró la belleza del pobre diablo por medio de un minucioso estudio anatómico (esos músculos marcados) y la espectacularidad del color, al modo manierista, con una luz difusa que impregna toda la obra.

Zinaida Serebriakova, Artista de la Belleza Cotidiana

Las obras de Serebriakova son pequeñas masterpieces que rezuman armonía y plasticidad; la vida rural, escenas domésticas con sus hijos jugando o comiendo, Zinaida reflejó en ellas el encanto de la vida diaria. 

Su forma de representar hacía su trabajo superior al resto de artistas de la época (ni hablar del realismo socialista soviético). Usaba una paleta preponderantemente en azul y amarillo pero nadie dominó como ella en toda Rusia la calidez y la emoción en cada pincelada.

Louise Abbéma, la Vie en Rose

La gran artista Louise Abbéma, marcó a La Belle Époque con sus retratos, esculturas e influencia en la moda.  

La cualidad etérea de su obra representó la quintaesencia del espíritu parisino; ella tenía un estilo simbólico, académico e impresionista; se especializó en retratos al óleo y acuarelas. Era muy requerida por las socialités del momento. 

Muchas de sus preciosas creaciones mostraron la influencia de pintores chinos y japoneses, así como de maestros contemporáneos tales como, por ejemplo, el estupendo Édouard Manet 🎨