martes, 26 de junio de 2018

Mademoiselle Desideratum


Veo seres humanos en emergencia
pero
con la naricita fría
la niña bracea suave, 
soñadora e interiormente, 
para enfrentar las demandas de la subsistencia

Se las da de dura
pero su halo de bebota deslumbra
y me genera siempre la misma pregunta:
¿será algún día
de las garras de las penas y las luchas
liberada?

Entre chorritos de agua y 
burbujas de jabón
dibuja versos, iniciales de flores 
y todo tipo de creaciones
  
Fantasea sedas antiguas
y los bordados más delicados
imaginando que todo es seleccionado 
con mimo desmesurado

Ella es pícara, candorosa,
diminuta, adorable; 
a diario se sacrifica
pero
vive en el edén del infierno,
un sitio donde no es retórico el miedo

Es como aquel jazmín que nació 
en el lugar equivocado, 
en tierra yerma, 
en momento no planeado

Hacen splash sus pisadas,
ay... a qué década me regresan?

Muñequita de la marginalidad, 
sos el perfecto compendio del desparpajo, la ternura 
y la fragilidad

Su delicadeza innata 
con los momentos que vive contrasta

Identificar un deseo propio
hasta hace poco no lograba, 
y aunque un día pensé que un thriller 
frenético contaba
me dijo que por primera vez alguien 
la escuchaba

Cada día se sube 
al carro de los placeres futuros
mientras sigue limpiando vidrios
sosteniendo un quebradizo andamiaje psíquico,
buceando en su imaginación, 
enfrentando el destino

Desde lejos un altanero escorpión negro
vigila en la arena movediza del averno; 
aún la rotación del cosmos no la favorece
y con dulce premisa
pide una ayudita
ensayando el arte de la conquista

Expuesta a los juegos grotescos
de la vida cotidiana
lustra el parabrisas
y se va genuina, inocente, con alegría;
se despide agitando su manito
porque le guiñó un ojo verde el semáforo
de "su" garito

Desde el pozo de la realidad
extrae el fruto de su inconsciencia
pero en su monólogo
con salir del infierno sueña

La niña que nos interpela
dice "ya falta menos"
 mientras continúa bordando sueños delicados,
a veces farsescos,
a veces dolorosos; 
sólo muy pocas veces, 
agónicos

♥ Carolina Haus ♥

No hay comentarios:

Publicar un comentario