Mientras la tarde se hundía
ella caminaba pensando que
vivir apurados podría ser malo,
en eso
un mágico granito de arena
del cielo cayó
y súbitamente,
una chispa brotó
Justo en la esquina
de la placita,
entre
un sol terminal
y la nochecita,
colisionó de repente de la placita,
entre
un sol terminal
y la nochecita,
con un chico sonriente
que le entregó
una florcita celeste
Quién imaginar podría
que con sólo un choque de miradas
en silenciosa poesía
la tarde se transformaría..!
la tarde se transformaría..!
Carolina Haus
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