La artista plástica argentina Adriana Zaefferer maneja a la perfección las técnicas de pintura al óleo, el dibujo con pastel, la tipografía y la escultura pero se especializa en caballos.
Sus obras ecuestres logran capturar la fuerza, la nobleza y esencia de los pura sangre; asimismo incorpora al trabajo figuras humanas, por lo general se trata de jinetes, entrenadores, petiseros o propietarios acompañando a los corceles.
Inspirada en largas caminatas en su Canadá natal pero también en los fondos geométricos de los videojuegos, Laura Bifano creó esta serie de picos combinando toques de fantasía y surrealismo creando así una apariencia mixta.
Al mundo iconográfico de Norma Bessouet lo gobierna la metáfora; es una invitación a despojarse de la literalidad e inmiscuirse en el profundo proceso de meditación y reflexión de la artista.
Se hace difícil clasificar exactamente su estilo ya que es elusivo, lo que sí puedo decir es que su impronta melancólica es inconfundiblemente argentina.
Me encanta el estilo afilado y angular del artista polaco Michał Sawtyruk; su trabajo se asemeja a la pintura con espátula de artistas expertos pero estas piezas fueron creadas de forma totalmente digital, utilizando una tableta Wacom y un agudo sentido de la arquitectura y el espacio.
Algunas de estas creaciones aportan un sutil toque de animación, otorgándoles destellos de movimiento y vida.
