Puigaudeau fue un pintor francés conocido por su maestría en capturar crepúsculos y efectos lumínicos, como los producidos por los fuegos artificiales. Aunque en su última etapa también pintó paisajes bañados por la luz del sol.
Gran parte de su obra se centra en paisajes marinos, bosques y pequeños pueblos; Puigaudeau formó parte del grupo de Pont-Aven, un movimiento artístico situado entre el impresionismo y el postimpresionismo que buscaba revitalizar la pintura a través de un contacto más íntimo con la naturaleza.