miércoles, 20 de diciembre de 2017

Super Mega Vivo, Super Mega Divertido

Entre pájaros y amaneceres verdes, el verano vuelve. 
Un disco de fuego blanco atraviesa las persianas y las cortinas flotan con la brisa de la mañana; hay tiempo y ganas de vivir, hay mucho que hacer porque sí. 

Voy a escuchar un caracol y salir a bicicletear al sol; voy comer una manzana de a dos, voy a despertarme sin reloj; voy a mis plantas regar y salir a caminar sin celular. 

El verano sabe a epifanía; es la cereza de la vida, hermosa, dulce y divertida. El verano es el domingo ir a navegar al río y sentir que todo en el mundo está en orden y tranquilo gracias al apoyo férreo de mis seres queridos.  

Es partir hacia un rumbo desconocido y hacer balance del año vivido; es divertirme mucho con las ocurrencias de mi brillante niño, es admirar los campos de girasoles, es contar nidos de horneros, mirar sus ojos y ver el cielo.

Es escuchar música a todo volumen y bailar "Chattahoochee" como si nadie me estuviera viendo. Es ignorarlo todo por un momento y sentirme al amparo del tiempo. 
El verano es besos y abrazos furtivos; es sábado a la noche y diversión con los amigos. Es perseguir luciérnagas y a la una ver un queso en vez de luna.

El verano nos hace crecer y comprar margaritas al atardecer. El verano sabe a poesía, a un tiempo de fantasía. El verano construye recuerdos y sabe hacernos renacer. Es guitarra, es fogón en la playa, es pulóver y andar descalza.

El verano es arena dorada y que el viento haga que la costa quede despoblada; también encajarnos en las dunas, enojarnos y después, reconciliarnos. El verano es durazno perfumado y blanco jazmín de aura especial, es creer en las cosas que queremos lograr. El verano es una rosa amarilla flotando en la orilla.

Es admirar la luna llena bailando sobre el tejado; el verano es mi gato anaranjado. Es descubrir que el chico que te gusta, gusta de vos y entonces volver a agradecerle a Dios; es ver amanecer en el camino y recorrer juntos el bosque de pinos.

Es mirar al cielo y viajar en alas de una estrella errante; es ir al cine y quedarme leyendo los títulos hasta el último instante. El verano es médanos y libertad que nos devuelve renovados pero a la vez deshilachados, medio agotados. 

El verano es festival vital y milagroso que cuando llega a su fin se transforma en un ángel etéreo y esplendoroso; nos despide con un beso en la mano y nos devuelve a casa, más dichosos. Es momento de con tiempo cocinar y la casa de amor llenar. 


1 comentario:

  1. Qué lindo, como nostálgico...El verano me trae tantos recuerdos y sensaciones. El tiempo pasa y todo es diferente.


    Carol

    Feliz Navidad!!! Qué pases hermosos momentos junto a los tuyos con armonía, paz y salud. Un cariñoso abrazo.

    Besos

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